Los adultos mayores presentan mayor riesgo de necesitar hospitalización o morir si se les diagnostica COVID-19 por lo que es importante identificar factores de riesgo y ejercer acciones para reducirlos, ya que ciertas afecciones también pueden aumentar el riesgo de enfermarse gravemente. Las personas que las visitan o viven con ellas, también deben tomar precauciones para protegerse de contraer el COVID-19. Si la persona adulta mayor ya está enferma es importante crear un plan de atención y seguir con sus medidas cotidianas para mantenerse saludable.
Las personas en sus 50 tienen mayor riesgo de enfermarse gravemente que las personas en sus 40. Del mismo modo, las personas en sus 60 o 70, en general, tienen mayor riesgo de enfermarse gravemente que las personas en sus 50. El riesgo más alto de enfermarse gravemente a causa del COVID-19 lo tienen las personas de 85 años de edad o más.
Condiciones que pueden aumentar el nivel de riesgo
Otros factores también pueden aumentar su riesgo de enfermarse gravemente, como tener ciertas afecciones subyacentes. Al conocer los factores que lo ponen en mayor riesgo, puede decidir qué precauciones tomar en su vida diaria. Si tiene una afección subyacente, debe continuar su tratamiento:
No suspenda sus medicamentos y no cambie su plan de tratamiento sin consultar a su proveedor de atención médica.
Tenga al menos un suministro para 30 días de sus medicamentos recetados y de venta libre. Hable con un proveedor de atención médica, su aseguradora y su farmacéutico acerca de obtener un suministro adicional (es decir, para más de 30 semanas) de sus medicamentos recetados, cuando sea posible, para reducir la cantidad de veces que debe ir a la farmacia.
No se demore en solicitar atención de emergencia debido a COVID-19. Los departamentos de emergencia tienen planes de contingencia para la prevención de infecciones, diseñados para protegerlo del COVID-19 en caso de que necesite atención.
Llame a su proveedor de atención médica si tiene alguna inquietud sobre sus afecciones subyacentes o si se enferma y cree que podría tener COVID-19. Si necesita ayuda de emergencia, llame al 911 de inmediato. Si no tiene un proveedor de atención médica, comuníquese con el centro de salud comunitario, o el departamento de salud más cercano.
Medidas para reducir su nivel de riesgo
La mejor manera de proteger a adultos mayores y ayudar a reducir la propagación del virus que causa COVID-19 es haciendo lo siguiente:
Use una máscara cuando interactúe con otras personas.
Limite sus interacciones cara a cara con otras personas tanto como sea posible, especialmente en interiores.
Manténgase alejado de otras personas (6 pies de distancia, o aproximadamente 2 brazos de largo).
Lávese las manos con frecuencia. Si no dispone de agua y jabón, utilice un desinfectante para manos que contenga al menos un 60% de alcohol.
Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca con las manos sin lavar.
Cúbrase con un pañuelo al toser o estornudar, o hágalo en la parte interna del codo y luego lávese las manos.
Limpiar y desinfectar las superficies y los objetos que se tocan con frecuencia.
Todos debemos tomar medidas para evitar contraer y propagar el virus que causa COVID-19 para poder protegernos a nosotros mismos, proteger a nuestras comunidades y proteger a quienes corren mayor riesgo de contraer enfermedades graves.